Enrique Jonguitud/ Entrevista.com
Ciudad Victoria, 15 de agosto.-La plaga forestal del gusano descortezador del pino dañó al menos 32 hectáreas de bosque de pino en Tamaulipas, en zonas de la Sierra Madre Oriental, por lo que se reforzó el Programa de Protección Forestal que encabeza la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR).
La Secretaría de Desarrollo Rural de Tamaulipas informó que en el segundo trimestre de 2025 se activaron tres notificaciones de saneamiento forestal para intervenir 32.3 hectáreas dañadas por el descortezador del pino, una plaga considerada entre las más destructivas para los bosques del estado.
A su vez el Sistema Nacional de Información Forestal (SNIF) dio a conocer que para el combate de incendios forestales y plagas, se destinan recursos por 1 millón 264 mil pesos.
Durante una reciente reunión del Comité Técnico de Sanidad Forestal de Tamaulipas, realizada en coordinación con la Comisión Nacional Forestal, se presentaron avances del Programa Operativo 2025, centrados en frenar el deterioro de los ecosistemas forestales por plagas y enfermedades.
La directora de Fomento Forestal de Tamaulipas, Celene Ramírez García, afirmó que “es fundamental mantener una coordinación efectiva entre instituciones para atender oportunamente las afectaciones que generan plagas y enfermedades en los ecosistemas forestales de la entidad”.
Las autoridades mostraron estadísticas actualizadas que reflejan la presión que ejercen las plagas forestales sobre áreas clave del territorio tamaulipeco, lo que ha obligado a reforzar las acciones de monitoreo, detección temprana y control en campo.
Expertos en sanidad forestal y representantes de dependencias como PROFEPA, CONANP, CONAFOR y la propia Secretaría estatal coincidieron en la urgencia de contener los brotes, bajo un esquema de cooperación técnica y seguimiento constante.
La Dirección de Fomento Forestal explicó que las áreas intervenidas fueron identificadas como de alta prioridad por el nivel de infestación, lo que justificó el inicio inmediato de medidas de saneamiento como corte, retiro y quema de árboles infectados.
El Comité Técnico reconoció que el cambio climático y la falta de intervención oportuna en algunas regiones han favorecido la proliferación de insectos nocivos como el descortezador, por lo que insistió en endurecer las acciones preventivas.